El restaurante con estrella Michelin más barato del mundo
La ventaja competitiva en costos no se limita solo a la comida rápida; en el campo de la alta cocina también es posible lograrla. Un ejemplo es Tim Ho Wan, un restaurante de dim sum en Hong Kong, que ostenta el título de ser el restaurante Michelin más barato del mundo. Fundado en 2009 por chefs con experiencia en cocinas prestigiosas, ahora cuenta con una presencia internacional en varios países y ha expandido su marca con más de treinta restaurantes. A pesar de ser un restaurante de alta cocina, logra ofrecer un menú completo a precios muy asequibles.
Azurmendi, restaurante con tres estrellas Michelin
El Restaurante Azurmendi, con tres estrellas Michelin en 2020, ha apostado por la diferenciación a través de la sostenibilidad. Ha sido galardonado con una estrella verde por su compromiso con la gastronomía sostenible. Desde su ubicación y diseño bioclimático hasta la reutilización del agua de lluvia y la producción de energías renovables, el restaurante demuestra un fuerte compromiso con el medio ambiente. Fue reconocido como el restaurante más sostenible del mundo en 2018.
Deliveroo lucha con autoridades locales por las cocinas ambulantes de comida para llevar
Deliveroo se enfrenta a disputas con las autoridades locales por el uso de cocinas llamadas "Roobox" en estacionamientos y polígonos industriales. Estas cocinas alojan a chefs que preparan comida para llevar para restaurantes modernos. La compañía es acusada de evadir las normas de planificación, y los residentes se quejan del ruido. Las cocinas temporales están destinadas a satisfacer la demanda de comida para llevar en áreas sin restaurantes de marcas populares, y cada contenedor permite a varios chefs trabajar juntos para preparar comida exclusivamente para llevar.
Tinder, botellón y pocos jóvenes: ¿por qué están cerrando tantos bares de copas?
Los hábitos de beber en la calle o usar aplicaciones para ligar, como Tinder, están afectando negativamente a las discotecas y bares de copas. El envejecimiento de la población y el aumento de opciones de socialización, como las redes sociales y las quedadas en casa, están llevando al cierre de muchos locales de ocio nocturno. El despegue de la economía no ha mejorado la situación, ya que el número de establecimientos especializados ha disminuido. Las redes sociales y las apps ofrecen nuevas formas de hacer amigos, y actividades como los videojuegos y las fiestas en casa también han ganado popularidad. El sector de ocio nocturno se ve desafiado por estos cambios y busca adaptarse a las nuevas tendencias.