que nos invitarán a experimentar el movimiento con un enfoque consciente: ratos de silencio y conexión interna, pies descalzos para quienes tengan ganas de sentir la tierra sin intermedios, móviles guardados en una bolsa.
Además, cerraremos la jornada al atardecer sembrando cápsulas creadoras de
Podemos convertir el bosque en un escritorio en movimiento y al aire libre, organizar rutas para que los equipos creativos resuelvan problemas y encuentren soluciones en contextos que facilitan el surgimiento de conversaciones que importan y a que operemos desde lugares más genuinos y personales. ¡Hablemos más! Escríbenos a