No hagas dieta

(Ajusta tu nutrición)

Las personas que luchan por perder peso habitualmente tienen una relación de amor/odio con las dietas.

(Sobre todo, odio).

Conozco gente que se pasa la vida a dieta, pero de manera intermitente, en momentos puntuales, sobre todo a principios de enero, y en septiembre, después de las vacaciones.

Van de dieta de moda en dieta y precisamente eso, es lo que les condena al fracaso.

Se ponen a dieta durante uno o dos meses, y luego vuelven a comer como siempre (mal).

El problema es que su "comer como siempre" probablemente sea la razón por la que tienen esa grasa acumulada.

Prueban la Keto durante un mes y tienen algo de éxito, luego lo dejan... vuelven a Paleo durante 6 semanas y pierden también algo, y luego lo dejan...

Más tarde hacen la detox durante 30 días y bajan 1 talla de pantalón, y luego lo dejan (y aumentan 2 tallas).

Esos cambios temporales en la alimentación dan como resultado, resultados temporales tanto en el peso como en el físico de cada uno.

¡Como un adicto que persigue el siguiente subidón, tienes que perseguir constantemente la siguiente dieta de moda porque tu alimentación normal es el principal problema!

Estar a dieta no mola.

El hambre, la eliminación de los alimentos preferidos y el uso de la fuerza de voluntad para evitar los antojos y los dulces es una estrategia terrible.

Así que te recomiendo dejar de hacerlo.

No es de extrañar que la gente abandone esas dietas tan pronto como las empiezan…

Es normal que acabes pensando…

"Si esto es lo que tengo que hacer para estar delgado, prefiero estar gord@ y fuera de forma pero feliz".

ERROR

Mi consejo aquí es comprometerse a NO hacer dieta.

Y, en su lugar, transformarlo en algo asi:

"Mi concepto de "comer normal" no está funcionando,

lo que significa que tengo que cambiar mis hábitos de forma permanente para poder estar saludable de forma permanente".

Piénsalo por un segundo.

Si nunca cambias de verdad los hábitos para siempre, y al poco tiempo vuelves a comer como estabas comiendo antes,

nunca conseguirás estar como quieres y, entonces la ÚNICA forma en que el resultado sea permanente es si realmente disfrutas de tu nuevo hábito.

¡Deja de hacer dietas!

No más píldoras mágicas, dietas detox o estrategias locas de 21 días.

Nada de lo que hagas puede ser temporal, o los resultados serán temporales.

En su lugar, haz cambios permanentes deliberados e incrementales en tu nutrición diaria y en tu entrenamiento, lentamente, durante un período de muchos meses.

Come, nútrete y entrena para alinearte con tus objetivos.

Si tienes miedo de renunciar a algo, ¡no lo haces!

Haz que los alimentos poco saludables sean más un placer y menos una penitencia diaria:

Si renunciar a la CocaCola para siempre da miedo, reduce lentamente de cuatro al día a uno al día.

Si renunciar a la pasta para siempre suena como una vida que no merece la pena vivir,

aprende que controlando los tamaños de las porciones y convirtiéndolo en no tan habitual tiene cabida perfectamente.

Lo mismo ocurre con las píldoras y suplementos dietéticos. No pueden reemplazar una buena estrategia de nutrición.

Cuando pienses en estar saludable este año, piensa en términos de días y años, no de semanas y meses.

Te llevó años obtener tu físico actual, y te va a llevar meses, años, corregirlo. Esto significa que TIENES que disfrutar del viaje.

Una vez que aceptes esto, puedes comenzar a hacer pequeños ajustes o cambios que te permitirán adherirte a tu plan.

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